
Milei escuchó al campo… pero siguió sordo: las retenciones no se tocan y el malestar se multiplica
En el lujoso escenario de la Exposición Rural de Palermo —ese templo de la tradición, el perfume a bosta fina y la promesa del país que alguna vez fuimos— el presidente Javier Milei hizo su aparición estelar con un gesto que parecía conciliador: se reunió con la Mesa de Enlace. Pero, como en esos culebrones de la política argentina, la expectativa terminó en desencanto. Escuchó, sí. Sonrió, también. Pero no aflojó un centímetro: las retenciones siguen tan firmes como su convicción anarco-capitalista… selectiva.