𝐔𝐧𝐚 𝐟𝐚𝐦𝐢𝐥𝐢𝐚 𝐝𝐞 𝐇𝐞𝐧𝐝𝐞𝐫𝐬𝐨𝐧 𝐞𝐧 𝐫𝐢𝐞𝐬𝐠𝐨 𝐝𝐞 𝐝𝐞𝐬𝐚𝐥𝐨𝐣𝐨 𝐬𝐨𝐥𝐢𝐜𝐢𝐭𝐚 𝐚𝐲𝐮𝐝𝐚 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐬𝐮 𝐡𝐢𝐣𝐚 𝐜𝐨𝐧 𝐝𝐢𝐬𝐜𝐚𝐩𝐚𝐜𝐢𝐝𝐚𝐝 𝐬𝐞𝐯𝐞𝐫𝐚

La voz de un padre desesperado

En diálogo con Radio Mágica Digital, en el programa Las cosas como son conducido por Andrea Pérez, Heraldo Montrubianesi relató la dura realidad que enfrentan:

“Es una situación demasiado compleja. Alma nació con una malformación congénita severa a nivel cardíaco: un único ventrículo con transposición de los grandes vasos. Ha pasado por cuatro cirugías a corazón abierto y su vida es un milagro”, expresó conmovido.
La niña, pese a sus limitaciones neurológicas y motrices, logró recientemente caminar con dificultad y se comunica con su familia. Sin embargo, su salud requiere medicación diaria, terapias permanentes y una vivienda en condiciones adecuadas, libre de humedad y segura para su frágil estado.

 Entre la enfermedad y la precariedad económica

Montrubianesi, que sostiene una pequeña verdulería, explicó que la crisis económica lo llevó a acumular cuatro meses de deuda de alquiler. La vivienda donde reside Alma junto a su madre y hermanas ya tiene orden de desalojo.

“Hoy estoy prácticamente en la quiebra. Siempre cumplí, incluso en los momentos más críticos de salud de mi hija, pero ahora no puedo. Necesitamos una casa en condiciones, no parches. No quiero tener que volver a pedir lo mismo dentro de poco”, remarcó.
La madre de Alma es empleada municipal y realiza trabajos extras para sostener el hogar, pero los ingresos no alcanzan. A esto se suman deudas de servicios y la falta de acceso a la pensión por discapacidad que aún no fue otorgada.

 Un pedido a toda la comunidad

La familia asegura que la prioridad es encontrar una vivienda estable y un trabajo que les permita sostenerse dignamente. Montrubianesi no descartó mudarse a otra ciudad donde Alma pueda acceder a mejores condiciones de atención médica.

“Lo único que pido es que alguien se ponga en mis zapatos. No quiero salir a robar, no es mi estilo. Solo quiero que Alma tenga una vida digna. Que esto se escuche hasta el último rincón de la Argentina”, concluyó.
 
El caso de Alma pone en evidencia no solo la vulnerabilidad de las familias con integrantes con discapacidad severa, sino también la urgencia de políticas de acompañamiento real que eviten que situaciones de salud crítica terminen agravadas por la falta de vivienda y recursos básicos.