
Mientras miles de argentinos hacen malabares con el precio del arroz y la luz, y los hospitales públicos remiendan como pueden la escasez de insumos, en el norte profundo del país –más precisamente en el Chaco– se inauguró un templo fastuoso al que llamaron, sin pudor, "Portal del Cielo". Pero este cielo no es para cualquiera: si querías ver al presidente Javier Milei compartir escenario con el pastor Jorge Ledesma, debías pagar entrada. Veinticinco mil pesos la básica, treinta mil la “preferencial”. Dios sabrá qué incluye.