Peligroso delincuente murió de dos puntazos en la cárcel de Urdampilleta

Como consecuencia de una riña entre internos, falleció este miércoles un preso alojado en el pabellón Nº 6 de la cárcel de Urdampilleta.

De acuerdo a información a la que pudo acceder a este medio, todo habría sucedido en las primeras horas de la tarde, cuando se desató una pelea en la que habrían intervenido 4 personas. Una de ellas recibió dos puntazos de arma blanca (presumiblemente una faca) que le atravesaron la vena yugular, en la zona del cuello.

El herido fue atendido con urgencia en el Servicio de Sanidad de la unidad carcelaria y trasladado, por la complejidad del cuadro, al Hospital Juana G. de Miguens de la localidad de Urdampilleta, donde fue atendido en la Guardia por el Dr. Arnaldo Brosky. En esa circunstancia el luego fallecido, de nombre César Maximiliano Aguilera González, de 23 años, hizo un paro cardíaco lo que determinó la necesidad de trasladarlo hacia el nosocomio de Bolívar.

En el trayecto, y pese a los esfuerzos del propio Dr. Brosky quien viajó en la ambulancia practicando RCP, el joven murió, por lo que su cadáver fue alojado en la morgue del hospital local hasta tanto se tomen las determinaciones correspondientes relativas a la operación de autopsia.

El recluso purgaba en la Unidad 17 una condena unificada a 13 años que vencía el 29 de Noviembre de 2030, por una causa de Homicidio Agravado dictada por el Juzgado de Ejecución Nº 4 de Lomas de Zamora. Se trata además de un delincuente con frondoso prontuario judicial cuyas andanzas comienzan antes de haber cumplido la mayoría de edad.

Estuvo alojado en un instituto de menores donde pasó 3 años por una causa de homicidio y siete de robo, en 2017 volvió a caer detenido tras tirotearse con policías y gendarmes. Se hacía llamar por el seudónimo “Turrón” y se le adjudican al menos otros 5 homicidios.